Sonreír, ver oír y callar.
Verás que no digo nada al respecto, verás que no lloro y que aparentemente no sufro; pero qué quieres que te diga, con el tiempo apredí a callar y a sonreír a pesar de estar rota como un espejo en pedazos.
Pero si te fijas bien, si posas tu mirada en mis ojos y miras con atención verás que no estoy bien, que me destruiste. Y un corazón roto no es nada fácil de arreglar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchos caminaron, pero pocos dejaron huellas... Deja aqui la tuya. Y recuerda que todas las opiniones son bien recibidas siempre y cuando sean educadas (se eliminará cualquier comentario que contenta falta de respeto o spam).
Por lo demás no os corteis, se agradece :)